Cecilia Meireles

           

     ceclia-meireles.jpg   07/11/1901 – 09/11/1964

Poetisa, profesora y periodista. En la década del 30, rompió con todos los tabúes de la sociedad con su defensa de una política menos moralista y una educación moderna. Como periodista, fue defensora de la idea universal de democracia en medio de un período de autoritarismo nacional.

Su poesía lírica y de gran interioridad, de simplicidad en la forma pero de imágenes y símbolos complejos, es de gran relevancia para la literatura brasileña del siglo XX.  

Cecilia Meireles nació en Rio de Janeiro, hija de un empleado del Banco do Brasil y de una profesora municipal. La muerte estuvo presente desde el comienzo en su familia, con  el nacimiento de tres hijos que no sobrevivieron y que Cecilia no llegó a conocer. Más tarde, su padre fallecería tres meses antes de su nacimiento y su madre a los tres años. Criada por su abuela, Cecilia desarrollo una profunda consciencia y sensibilidad desde niña, habituada a la soledad y rodeada de libros. Comenzó a escribir a los 9 años y se incorporó a la docencia como profesora pública a los 16.  

Dos años más tarde iniciaba su carrera literaria con la publicación de la colección de sonetos simbolistas Espectros en 1919. La obra poética de Cecilia en la década del 20, revela poca afinidad con las tendencias nacionalistas de moda en libros como Nunca mas… Poema de los Poemas (1923). Crianza, mi amor (1924) y Baladas para el rey (1925) En 1922 se casa con el pintor portugués, Fernando Correia Dias, con quien tiene tres hijas. Su marido se suicida en 1935. Cecilia vuelve a casarse en 1940. 

Entre 1925 y 1939, se dedica a la carrera docente y publica varios libros infantiles. En 1930 escribe para “Diário de Notícias” una página diaria sobre los problemas en la educación. También funda en Rio de Janeiro la primera biblioteca para niños de Brasil.  Enseña literatura brasileña en Portugal hasta que reaparece en el escenario poético luego de 14 años de silencio con Viaje (1939), un libro considerado de gran madurez e individualidad. Ese mismo año recibe el Premio de la Academia Brasileña de Letras. A partir de allí nunca más deja de publicar. Varios de sus libros están inspirados en sus viajes, en los que ahonda en la comprensión de la humanidad a  partir de su contacto con las personas y sus costumbres.

También escribió sobre temas pedagógicos y folklóricos y prosa lírica como Giroflê giroflá (1956), Escoja su sueño (1964) e Inéditos (crônicas – 1968).
Entre los libros de poesía que publica después de 1939 se encuentran: Música Vaga (1942), Mar Absoluta (1945), Retrato Natural (1949), Romancero de la desconfianza (1953), Metal Rosicler (1960), Poemas Escritos en la India (1962), Solombra (1963) y O esto o aquello (temática infantil, 1964). 

Cecilia Meireles fue una de las grandes defensoras de la libertad, en una época marcada por la dictadura y la represión del llamado “populismo” de Getúlio Vargas. Esto le significó la persecución de una serie de enemigos debido a sus convicciones y crítica al sistema. Una de sus mayores luchas fue la defensa de una escuela pública libre, mixta sin la interferencia arbitraria de la familia ni de la iglesia. Por eso se ganó la ojeriza de la iglesia católica a lo largo de 30 años y aún hoy, cuando muchas veces se hace una lectura equivocada de su obra.

Cecilia termina con La «Página de Educação» del “Diário de Notícias” en enero de 1933, cuando cansada de las maniobras políticas del gobierno y el estado de la educación en Rio de Janeiro expresa su “horror” ante su labor periodista. No obstante el diario carioca «A Nação» la contrata para escribir sobre todo, ¡menos política!

En la década del 40 escribe sobre folklore para el diario «A Manhã». En la década del 50, vuelve al «Diário de Notícias», para escribir en el «Suplemento Literário», dónde ya habían colaborado Mário de Andrade y Sérgio Buarque de Holanda. Termina su carrera periodística en la década de 60, en “Folha”.

Cecilia Meireles viajó extensamente dando conferencias en América Latina, EE UU y Portugal y recibió varios premios y honores en varios países. Luego de su muerte debido al cáncer, continuó recibiendo honores y premios póstumos por su obra poética y educativa. 

“Mas, en esta  aventura del sueño expuesto a la corriente,
apenas recojo el gusto infinito de las respuestas que no se encuentran.” Cecilia Meireles.
 

“En toda la vida, nunca me esforcé por ganar ni me sorprendí por perder. La noción o el sentimiento de la transitoriedad de todo es el fundamento mismo de mi personalidad.”
Cecilia Meireles.
 

2 comentarios en “Cecilia Meireles

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